Lazos ardientes (Bound)

Lazos ardientes empieza cuando una mujer ruda pero sexy se está mudando a un nuevo piso, y se encuentra en un ascensor con alguien que parece ser un gángster y su novia.

El nombre de la chica nueva es Corky, y se trata de una lesbiana convicta recién liberada, que se está encargando de un trabajo de construcción en el edificio.

Su vecino de al lado es un gángster de Chicago, que blanquea dinero para la mafia y cuya novia es secretamente una lesbiana llamada Violet, quien inmediatamente manifiesta un deseo por su nueva vecina bastante evidente.

Es por ello que Violet se inventa una excusa para encontrarse con Corky: utiliza la historia de su anillo cayendo en la tubería del lavabo y contrata a Corky como fontanera.

Poco después, estas mujeres se convierten en amantes y Violet le dice a su chica que quiere huir de Caesar, pero tiene demasiado miedo de decirle que es lesbiana y dejarlo.

Así que ambas deciden utilizar la experiencia criminal de Corky y los privilegios de Violet para robar un millón de dólares que Caesar llevó a su casa para entregarlos al jefe de la mafia de Chicago, Gino Marzone.

Lazos ardientes (Bound) se adentra entonces en una trama trepidante de manipulaciones, violencia, giros inesperados… y de repente empiezan a aparecer cadáveres con los que lidiar y las cosas empiezan a salirse de control.

En un principio, la película no parece ser más que una historia erótica para pasar el rato, pero entonces el argumento se complica, y se complica aún más, retorciendo a los personajes y convirtiendo su historia en un laberinto.

Un laberinto que involucra tiempo, espacio, dinero, peligro, lujuria y traiciones por la espalda, convirtiéndola en una de las mejores películas de suspense jamás creadas.

Esta película, que fue el debut de los hermanos Wachowski como directores (actualmente hermanas Wachowski después de que ambos cambiaran de sexo), mostró exactamente cómo piensan que debería verse y sentirse una película neo-noir, con algunos primeros planos muy imaginativos e incluso incómodos.

También tiene mucho humor seco, y escenas grabadas de manera extremadamente artística. Todo esto combinado para hacer que no te despegues de tu asiento.

El guión es increíblemente bueno, impecable y sin agujeros en la trama. Estructuralmente, la película es muy fuerte. La narrativa es verdadera, además de que cuenta con diálogos inteligentes, altos aspectos tecnológicos y unos toques visuales sorprendentes.

Adicionalmente, los diferentes escenarios y detalles están construidos tan perfectamente como una historia de los Hermanos Marx:

• El maletín lleno de dinero moviéndose como si se tratara del truco del guisante oculto dentro de tres vasos.
• Los billetes de 100$ colgados como calcetines en el apartamento de Caesar.
• Los poderosos jefes de la mafia llegando a la Costa Este para aumentar la desesperación de Caesar.
• O el botón para devolver la llamada en un teléfono que mantiene a la audiencia temblando de miedo y placer.

Los Wachowskis desarrollan el punto detonante del romance de la pareja con encuentros sexuales que van aumentando en intensidad y que culminan en un apasionante episodio que rompe los límites de Violet y Corky de comprometerse la una con la otra.

Jennifer Tilly y Gina Gershon tienen tanta química entre ellas que son eléctricas cuando están juntas, la pasión entre sus personajes es instantánea y ardiente, sexy pero tierna.

Sus actuaciones son simplemente increíbles.

Por un lado, está claro que Gina Gershon utiliza una forma meticulosa de actuación, dado que su personaje se puede ver llena de intensidad.

Ella da forma e inteligencia a su interpretación de Corky, una lesbiana que es seca, precavida, inteligente. Increíblemente sexy y a la vez irradia energía masculina. Muestran sus musculosos brazos tatuados, además de que camina como un vaquero.

Por otro lado, Jennifer Tilly toma el papel de la niña risueña y lo utiliza para esconder una voluntad de acero, es seductora y perversa.

Su personaje, Violet, es femenina, utiliza vestidos que resaltan su amplio busto y los combina con su voz sedosa, lo cual verifica su habilidad de seducción. Pero tiene los elementos para sugerir que debajo de su exterior de esposa devota existe una mujer inteligente y capaz de mucho más.

Adicionalmente, Joe Pantoliano, quien interpreta a Caesar, maneja magníficamente el cambio que su personaje sufre, pasando de un tranquilo mafioso blanqueando dinero a un frenético delincuente.

En Bound tiene una de las escenas más difíciles, y en la gran mayoría de la historia se encuentra en el borde de la histeria.

Pero cada cierto tiempo su visión se aclara y piensa que puede ver un camino para escapar, saltando de la paranoia a la ambición, a la lujuria, al terror absoluto, lo cual solamente puede ser logrado por un actor verdaderamente bueno, y además lo hace de manera creíble, casi evocando simpatía de la audiencia.

No es una sorpresa entonces el ver que las opiniones del espectador son increíblemente buenas, convirtiendo a Lazos ardientes (Bound) en una opción muy recomendable:

Lazos ardientes es una película que se gana cada punzada de tensión que genera en la audiencia.

Lazos ardientes es una de esas películas que te va a absorbiendo lentamente, te sacude y te deja sin aliento. Es cine puro, esparcido en diversos géneros. Es una película juguetona, una película de gangsters, una película de sexo y una comedia.

Es una película que recompensa a su público con una estilizada e inteligente incursión a la eternamente turba confluencia del bien y el mal.“Lazos ardientes es el tipo de suspense que te hace querer volver a ver la película para descubrir detalles que te perdiste la primera vez por estar demasiado inmersa en la tensión.