No voy a disculparme

Mila Martínez nació en España, más específicamente en Valencia (1962). Estudió Derecho y luego se dedicó a la escritura, que según ella es un “compartir historias que salen de su cabeza”.

Su última publicación es una novela titulada Insurrectas (2021) y ha tenido éxito, como las demás.

En total, lleva ocho novelas publicadas. Ha obtenido reconocimientos por sus textos y su escritura.

Tiene presencia en la red con su blog “Beso de Luna”. Su título es un guiño a sus lectores, porque remite a un lugar que aparece en alguno de sus libros.

Aquí la autora interactúa con los personajes de sus novelas. Y lo hace dialogando con ellos y haciéndoles preguntas.

La novela No voy a disculparme nos cuenta la historia de una escritora, Mel. Quien después del rompimiento con su pareja, puso un “no molestar” en la puerta de sus relaciones.

Hasta ese momento estaba muy segura de que esa relación era todo lo que había esperado.

Sin embargo, pasado el tiempo, el romance vuelve a tocar de nuevo su puerta haciendo que se replantee todo de nuevo.

Luego se reencuentra con Carla, una mujer bella, atractiva e interesante. De hecho, es mucho más joven que ella, hija de una querida y vieja amiga, Alex, que también es su editora.

Carla siente un profundo deseo y amor por Mel desde que era una adolescente. En esa época ella deliraba por aquella mujer mucho mayor, amiga de su madre.

Luego se fue a París a estudiar y se convirtió en una prometedora ejecutiva de modas. Durante mucho tiempo, escondió este secreto deseo pero no lo olvidó. Sin embargo, con el tiempo se dio cuenta de que era algo más que un simple capricho de juventud.

Al reencontrarse, todo se reinicia para Carla. Por su parte, Mel queda eclipsada con esta bella y atractiva mujer, que tenía mucho tiempo sin ver. ¿Te imaginas por dónde va la historia?

Sí, comienzan con un romance junto a las complicaciones que merece una buena historia. Pero no es solo romance.

La historia de No voy a disculparme toma un rumbo particular al mismo tiempo que llega Carla. Un conflicto de relaciones se va desplegando en la novela.

Mel comienza a experimentar extrañas y misteriosas sensaciones sobrenaturales y eróticas.

Una especie de presencia —¿un fantasma?—. Se comunica con ella dejando alterando sus sentidos y su cuerpo.

Su lectura nos deleita con una historia que intenta entrelazar el romance, las complicaciones de las relaciones, la sexualidad y lo espiritual.

No voy a disculparme es un relato que cuenta con un ritmo veloz y que devoramos ávidamente, casi sin darnos cuenta.

Esto se logra por la sencillez de su narrativa. Gracias a que los personajes no presentan una gran complejidad psicológica.

Alguna personas podrían no agradarse con lo predecible que es la historia de No voy a disculparme. Incluso, podrían considerarlo negativo.

Ya que desde el principio queremos enterarnos sobre qué les sucederá a las protagonistas enamoradas. También de cómo resolverán su conflicto amoroso y qué pasará con la presencia sobrenatural. ¿Cuál es su sentido y significado en la historia?

La lectura del libro la hacemos con una naturalidad y rapidez que nos asombra. Sumado a que no es un libro de excesivo volumen.

No voy a disculparme pretende señalar que nadie debe disculparse por sus sentimientos, ya sean de deseo, de temor o de esperanza.

La construcción de los personajes es muy inteligente. Y en ellos se van a plantear disyuntivas entre el amor, la amistad, la fidelidad y el trabajo.

Los diversos giros de la historia, la logran complicar. De hecho, mucho más la vida de la protagonista.

Este libro No voy a disculparme ha sido editado diversas veces. Por lo tanto, se puede decir que ha tenido éxito editorial.

Entre otras cosas, porque es un libro ligero desde el principio hasta el final. Es un libro que lo recomiendo sobre todo para leerlo en un domingo tranquilo mientras buscas relajarte.

Ya que su extensión es muy corta. Asimismo, el estilo de la narración de No voy a disculparme se presenta de manera muy digerible para todas las lectoras.